La recaudación por IRPF roza los 50.000 millones en lo que va de año y apunta a nuevo récord
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La Agencia Tributaria ha recaudado en los primeros seis meses del año 49.931 millones de euros por IRPF, un 11,1% más que en el mismo periodo del año anterior, y una cifra que adelanta un nuevo récord para el conjunto del año.
Este impuesto es el que está aportando a las arcas públicas más cantidad de ingresos, debido a la mejora del empleo, ya que cuantas más personas están trabajando, más recauda el Estado por IRPF; y a las subidas salariales, que han sido de en torno al 5% en la primera mitad del año. Al elevarse el sueldo de un trabajador, el tipo efectivo de IRPF se incrementa, ya que la tarifa del impuesto se estructura en tramos y es progresiva (a mayor sueldo, mayor tipo impositivo).
Influye en este incremento recaudatorio el hecho de que el Gobierno se haya negado a deflactar el IRPF para evitar que las subidas salariales que hayan sido equivalentes o inferiores a la inflación se vean expuestas a tipos superiores, ya que en la práctica eso implica que el trabajador no experimenta una ganancia de poder adquisitivo pero sí tiene que pagar más a Hacienda. Economistas y expertos, así como la oposición, le han pedido al Ejecutivo que deflactara la tarifa y los tramos, aunque fuera en las primeras capas de renta (hasta el entorno de los 40.000 euros), pero éste no ha querido hacerlo, así que se ha producido «un incremento del tipo efectivo» que se aplica del IRPF. Al tributar por un tipo más alto, de media, lo recaudado crece.
«Las retenciones vinculadas a los salarios siguen creciendo por encima del 9%, con un incremento de la masa salarial superior al 7% (con aumentos salariales alrededor del 5,5% y crecimiento del empleo cercano al 2%) y una subida del tipo efectivo superior al 2%», explica el organismo adscrito al Ministerio de María Jesús Montero.
El sindicato de Técnicos de Hacienda ha calculado para EL MUNDO que la Agencia Tributaria podría ingresar 2.114 millones de euros menos al año por IRPF si hubiera deflactado la escala del impuesto conforme a la inflación promedio utilizada para revalorizar las pensiones (del 8,5%), partiendo únicamente del impacto en los asalariados -con datos salariales de 2021- y sin tener en cuenta el efecto de la medida en los pensionistas; con lo que la merma (y el ahorro para los contribuyentes) sería en la práctica superior.
La Agencia Tributaria también ha recaudado más por la subida de las pensiones, que se han revalorizado este año un 8,4%, lo que implica también más pago de impuestos: «Las retenciones ligadas a las pensiones aumentan algo más del 19%, con un incremento de la masa de pensiones del 11,4% (como consecuencia del incremento de la pensión media) y una subida del tipo de alrededor del 7%, registro elevado teniendo en cuenta la rebaja del impuesto a las pensiones más reducidas».
Por estos motivos, la AEAT ha recaudado este año 4.983 millones más que en los primeros seis meses de 2022 por este gravamen, siendo el que más ha aportado a las arcas públicas, a pesar de «haber dejado de ingresar 306 millones de euros por el aumento de la reducción para rendimientos del trabajo para rentas bajas», inferiores a 21.000 euros, según recuerda a este medio Luis del Amo, secretario técnico del Registro de Asesores Fiscales.
Para el conjunto de 2023, el Ministerio de Hacienda había estimado que la recaudación por IRPF llegaría hasta los 113.123 millones, un 7,7% más que en 2022, pero este ritmo de aumento se ha visto superado hasta la fecha, ya que el incremento interanual de lo acumulado en los primeros seis meses del año es del 11,1%.
En 2022, la recaudación por IRPF fue de 109.485 millones de euros y en total el Estado ingresó 255.463 millones. Para este ejercicio, la recaudación total alcanzará los 262.781 millones, un 7,7% más, según los pronósticos de Hacienda. Hasta la fecha, los ingresos tributarias acumulan un incremento del 3,8% interanual, la mitad.
Aunque el IRPF está contribuyendo más de lo esperado a ese aumento de la recaudación previsto, el IVA no está dando la talla como se esperaba. El año pasado en estas mismas fechas, este impuesto acumulaba un incremento del 20,6% en la recaudación, aupado por el buen dinamismo del consumo y, sobre todo, por la inflación, que al elevar los precios aumentaba lo que recaudaba el Estado por cada compraventa.
Sin embargo, en esta primera mitad del año, el aumento de la recaudación por IVA se limita al 0,1%, hasta los 42.458 millones de euros. Hacienda explica que esta evolución se debe, por un lado, a la comparativa con unos meses del año anterior en que la recaudación creció mucho impulsada por los precios (el año pasado la inflación promedio fue del 8,4% interanual y este año, en lo que va de ejercicio, se sitúa en el 3,8%) y, por otro, a que el Gobierno ha aprobado rebajas de IVA en varios alimentos, de ahí que el tipo efectivo de las declaraciones mensuales haya disminuido un 14%.
De hecho, el Ejecutivo calcula que la rebaja del tipo de IVA en la alimentación supondrá una merma de recaudación y un ahorro para los consumidores de 626 millones de euros en el conjunto del año.
Para todo 2023, el Gobierno esperaba un aumento de la recaudación por IVA del 5,9%, pero dada la evolución en lo que va de ejercicio, este incremento deberá producirse íntegramente en la segunda mitad del año.
Además del IVA y el IRPF, la Agencia Tributaria ha recaudado 2.788 millones de euros por el Impuesto de Sociedades en la primera mitad del año (un 10% más en términos homogéneos). La AEAT señala que la recaudación ligada a los beneficios empresariales ha crecido hasta junio un 24,9%, un aumento que se observó sobre todo en grandes empresas, sobre todo del sector bancario y energético. También se ingresaron 9.961 millones por Impuestos Especiales (prácticamente lo mismo que el año pasado) y 5.905 millones por el resto de tributos.